Una riflessione oggi...

Libro di Giona, Capitolo 2
9
Quelli che adorano gli idoli
ti hanno abbandonato.
10 Ma io canterò lodi a te,
ti offrirò sacrifici
e farò quello che ho promesso.
Sei tu che salvi, o Signore!'.
11Poi il Signore diede un nuovo ordine e il pesce vomitò Giona sulla spiaggia.

giovedì, febbraio 07, 2013

Noviazgo a la manera de Dios


NOVIAZGO A LA MANERA DE DIOS
¿Cómo sé que estoy realmente enamorado de alguien y que es la voluntad de Dios?
Asumiendo que Ud. es creyente por el hecho de haber recibido a Cristo como su Salvador personal voy a proseguir adelante. Bajo esta premisa, Ud. podría saber si está enamorado haciéndose las siguientes preguntas:
Primero: ¿He orado fervientemente al Señor por una enamorada, aún antes de conocer a la chica que ahora me gusta? En el caso del creyente, el enamoramiento comienza no cuando se encuentra con una chica que es muy atractiva físicamente y su corazón late más aprisa cuando se encuentra con ella, sino cuando en la comunión íntima con el Señor en su palabra y la oración ruega a Dios por que Dios traiga a su vida la persona con quien Ud. va a compartir el resto de sus días como esposa.          
Ningún joven creyente debería entrar al enamoramiento sin antes haber cultivado una íntima comunión con el Señor. Me imagino que Ud. conoce a una chica que le gusta mucho. Si Ud. no ha estado en comunión con el Señor con anterioridad, y siente una atracción hacia esa chica, seguramente no es Dios quien esté poniendo esa atracción en Ud. sino sus hormonas, su instinto por tener una compañera. La base del enamoramiento no es el atractivo físico entre la pareja de enamorados, tampoco es el amor entre enamorados. La base del enamoramiento debe ser la voluntad de Dios, quien pone en el corazón de los dos el deseo de unir sus vidas en matrimonio.          
                                             
Ya que hemos hablado de matrimonio, permítame una advertencia: Si no piensa casarse con aquella chica, no pierda su tiempo y su santidad enamorándose de esa chica. El enamoramiento no es un pasatiempo. El enamoramiento no es un día sí y el siguiente no. El enamoramiento guiado por el Señor es la antesala del matrimonio.          
                      
Segundo: ¿Es esa chica creyente? La Biblia es clara en manifestar que la voluntad de Dios es que un creyente se enamore y se case exclusivamente con otro creyente del sexo opuesto.
2ª Corintios 6:14 dice: "No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? "
Un enamoramiento entre un creyente y un incrédulo es contrario a la voluntad de Dios. Si la chica que a Ud. le gusta no es creyente y Ud. siente una atracción hacia ella, no es Dios quien ha puesto esa atracción en Ud. Esa atracción es fruto de su propio deseo, de su propia pasión. Si Ud. persiste en esa unión desigual, Ud. lo lamentará grandemente tarde o temprano, probablemente más temprano que tarde.
Cuando alguien está en este caso, la pasión es tan fuerte que anula a la razón. El joven o la joven creyente razona más o menos de la siguiente manera. Bueno, yo soy creyente, él o ella no es. Qué buena oportunidad para guiarle en los caminos del Señor por medio de enamorarme de él o de ella.
Parece lógico, pero el problema está en que este razonamiento contradice la palabra de Dios cuando dice que los creyentes no deben unirse en yugo desigual con los incrédulos. Un buen fin, que es llevar a un incrédulo a los pies del Señor, no debe llevarse a cabo con un mal medio, como esto de unirse en yugo desigual con un incrédulo. El fin no justifica el medio.
Tercero: Asumamos que Ud. ha orado al Señor por una enamorada y la chica que le gusta es creyente. Entonces debería hacerse la siguiente pregunta: ¿Están mis padres, los padres de ella y los líderes de la iglesia de acuerdo con esta relación? Quizá Ud. dirá: ¿Qué tienen que ver mis padres en algo que es asunto mío? ¿Qué tienen que ver los líderes de la iglesia en mis cosas personales? Estas preguntas tienen respuesta en la palabra de Dios.
Colosenses 3:20 dice: "Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor."
Los hijos creyentes deben andar en sumisión a sus padres, aún cuando sean mayores de edad. Por tanto, una decisión tan importante como aquella de enamorarse de alguien debe ser en total acuerdo con los padres tanto suyos como de la chica que a Ud. le gusta. No es prudente un enamoramiento a espaldas de los padres o peor todavía, en contra de la voluntad de los padres.
Hebreos 13:17 dice: "Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no es provechoso."
Los pastores o líderes de la iglesia local donde Ud. se congrega han sido puestos por Dios como autoridades sobre la congregación. Su responsabilidad es sujetarse a ellos. Ud. por tanto está en la obligación de buscar el asesoramiento de ellos para saber si debe o no entablar una relación de enamoramiento con alguien. No desprecie a los pastores de su iglesia haciendo cosas que ellos no han sido al menos informado.
Cuarto: Asumamos que tanto sus padres como los líderes de la iglesia están de acuerdo con su probable relación de enamoramiento. La pregunta que debe hacerse sería: ¿Está la chica que me gusta, dispuesta a tener una relación de enamoramiento conmigo? Ud. puede haber estado orando por una enamorada, esta chica puede ser creyente, Ud. puede haber obtenido el apoyo de sus padres y de los líderes de la iglesia local, pero eso no significa que ya es enamorado de ella, porque falta que ella dé su palabra de aceptación.
Para eso, yo le recomendaría que Ud. de una manera muy madura y respetuosa hable con ella para indicarle que Ud. ha estado orando por ella para que sea su enamorada y que le gustaría saber si ella está de acuerdo con eso. No cometa el error de exigir una respuesta ese mismo instante o al día siguiente o la semana siguiente, etc. Recuerde que Ud. está tratando de hacer las cosas en la voluntad de Dios y si es de Dios, Ud. no tiene por qué apresurar las cosas. Pida a la chica que comience a orar por este asunto, y cuando ella esté segura que Dios ha respondido a su oración sobre este asunto, que le haga conocer.
La chica entonces tendrá que seguir los mismos pasos que Ud. ha dado, es decir, debe esmerarse por tener una comunión íntima con el Señor, debe orar al Señor sobre este asunto, debe buscar la guía de la palabra de Dios, debe consultar a sus padres y a sus pastores y si todo concuerda debería hablar con Ud. para comenzar la relación de enamoramiento. Recién allí, se podría decir en honor a la verdad que Ud. sabe a ciencia cierta que está enamorado y que eso es la voluntad de Dios.
Lo que hemos sugerido no concuerda con la costumbre de enamoramiento que prevalece en el mundo. La razón es muy sencilla. El enamoramiento al estilo del mundo se fundamenta en lo físico y deja a un lado lo espiritual. Según el mundo, si a Ud. le gusta una chica, simplemente va, le habla y de frente le dice que ella le gusta y que le encantaría ser enamorado de ella. Si Ud. cae bien a la chica, ella también dirá que Ud. le gusta y eso es todo. Ya son enamorados.
Pero note que todo gira alrededor de lo físico, de lo que perciben los ojos, de lo material. Dios no tiene nada que ver en este plan. No es extraño que enamoramientos que comienzan así terminen mal y cuando llegan al matrimonio, la posibilidad de éxito es mínima. No juegue a la ruleta rusa. Usted conoce al Señor, deje que el Señor guíe el proceso de enamoramiento. Dios sabe lo que es mejor para Ud. y cuando permitimos que Dios maneje nuestros asuntos tenemos garantizado el éxito tanto en el enamoramiento como en el matrimonio.
Dios les este bendiciendo grandemente.
Atentamente,
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Jóvenes más que Vencedores – Sullana
Iglesia Evangélica Apostólica del Nombre de Jesús

Guzmàn, Pedro A. - pastore. Torino, Italia 
www.ChiesaTorino.com  (Turin, Italy)
Chiesa, church, iglesia: (Italy 39+) 011 374 2450 (land line - fisso)
Pastore, cellulare: 
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From Colombia ( study translated to Italian by sorella Cristina, Torino )


Anche i cammelli bevono

Credi che Dio possa guidarti verso il coniuge giusto per te? Una storia biblica

ci dice che il modo in cui Dio lo fa: “ E Abrahamo disse al servo più anziano di casa sua

che aveva il governo su tutti i suoi beni: «Deh, metti la tua mano sotto la mia coscia; 3 e io ti farò

giurare per l'Eterno, il DIO dei cieli e il DIO della terra, che tu non prenderai per moglie a mio
figlio alcuna delle figlie dei Cananei, in mezzo ai quali io dimoro” ( Genesi 24:2,3 )

In questo capitolo ci sono molto più che semplici principi generali circa il

fidanzamento o il matrimonio; ci sono cinque importanti verità spirituali su
come trovare il compagno/a che Dio ha per la tua vita.

1. Ecco qui la prima regola per trovare il compagno della tua vita in

conformità alla volontà di Dio: Non ti innamorare dei Cananei. Chi sono
i Cananei? Un cananeo è una persona in conversa, qualcuno che
veramente si preoccupa soltanto di se stesso che non ha mai voluto
dare la sua vita al Signore, che non fa di Cristo il centro della sua vita.
Attenzione! Anche in chiesa possono esserci dei cananei.
Guarda bene come la parola cananeo si somiglia alla parola canino. E l’amore
cananeo in una forma un po’ più delicato diventa un amore “di cagnetto/
canino”(riferito a cane) e nei peggiori dei casi diventa una “vita da cani”. Se
stabiliamo un amore con un cananeo non ti sorprendere se ti tratta come un
cane. Tu dai da mangiare a un cane, giochi con un cane ma con un cane non
sei disposto a sposarti.

2. “ …ma andrai al mio paese e al mio parentado…” (Genesi 24:4)


Cerca tra il popolo di Dio la persona che Lui ha predisposto per te.

I matrimoni cristiani devono edificarsi avendo come base un amore verso
Gesù.

“Non vi mettete con gli infedeli sotto un giogo diverso, perché quale relazione c'è tra la giustizia

e l'iniquità? E quale comunione c'è tra la luce e le tenebre? E quale armonia c'è fra Cristo e
Belial? O che parte ha il fedele con l'infedele?” ( 2 Corinzi 6:14,15)

Di certo puoi sentirti bene stando in compagnia di persone che amano

Dio e puoi addirittura fare amicizia con i discepoli di Gesù ma se non puoi
avere amicizie con altri cristiani non potrai nemmeno portare avanti un
fidanzamento. “ma se camminiamo nella luce, come egli è nella luce, abbiamo comunione gli

uni con gli altri, e il sangue di Gesù Cristo, suo Figlio, ci purifica da ogni peccato.” ( 1 Giovanni

1:7)

3. Il servo di Abrahamo fece una buona domanda: Come avrebbe trovato

la donna precisa e
giusta per il figlio del suo signore?
Abrahamo gli diede un consiglio: “…egli manderà il suo angelo davanti a te, e tu

prenderai di là una moglie per mio figlio.” ( Genesi 24:7)


Dunque la seconda regola è questa: Esci con l’angelo che è stato inviato da

Dio.
C’è qualcosa di certo riguardo al servo di Abrahamo: lui credette veramente
che Dio lo avrebbe guidato verso la donna che lui stava cercando. E se tu
vuoi il meglio di Dio, devi veramente confidare nel Signore e Lui ti indirizzerà
nello stesso modo. “Così come hai creduto, ti sarà dato”.
Alcuni giovani hanno paura di confidare in Dio quando si tratta di pensare alla
donna con la quale dovranno sposarsi. Questi lascerebbero che Dio guidasse
tutto, ogni cosa ma stranamente per la loro mente passa l’idea che Dio non
sa nulla riguardo allo scegliere il coniuge per loro. Tuttavia ci sono due cose
che riguardano Dio e che noi dovremmo sapere: 1) Lui è veramente saggio. 2)
Lui è veramente amore.
Ciò significa che Lui non commette mai un errore e ciò che Lui decide per noi
sarà sempre in aspettativa con ciò che il nostro cuore ha bisogno veramente.
L’angelo di Dio troverà per te un altro “ angelo” terrenale con il quale potrai
condividere la tua vita.

4. “La fanciulla era molto bella d'aspetto…” ( Genesi 24:16)

Sei disposto per la seguente regola?
Lei deve essere bella; Lui deve essere bello. Guarda che lo dice la Bibbia!
Dio è molto più buono di quanto ci saremmo mai immaginati. Nessuno
capisce la profondità dei pensieri amorosi che Lui ha per noi.
Sì, la persona con la quale tu ti sposerai deve essere bella o quanto meno
carina per te. Forse potrai pensare di non essere bello e che quindi la
donna dei tuoi sogni potrebbe pensare che tu non sei l’uomo giusto per lei.
Forse potrai pensare di non essere bella e che quindi l’uomo dei tuoi sogni
potrebbe pensare che non sei la donna che lui vuole.
Non disperarti! Puoi essere bella e puoi anche essere molto carina! La
bellezza non si compra né tanto meno viene prodotta geneticamente. Ci
sono alcune persone che hanno dei visi molto belli ma hanno dei cuori
brutti e per questo stesso motivo non sono belle. La bellezza reale è quella
che viene da dentro di noi.

William Booth una volta disse ai suoi figli: “ Non cercate soltanto un bel

viso con il quale vivere i 365 giorni dell’anno. Cercate, anzi, quei doni e
virtù femminili più profondi con i quali vostra madre ha arricchito la mia
vita.” La persona più bella esternamente nella Bibbia non è stato il Signore
Gesù. Tale persona è stato un angelo di così grande gloria e bellezza che
è stato chiamato “ il figlio del mattino”; però la sua bellezza lo aveva fatto
diventare orgoglioso, ha peccato contro Dio ed è stato gettato dal cielo.
La gente che aveva visto il Signore qui sulla terra non se ne ritornava
dicendo: “ Straordinario! Non aveva Lui l’apparenza di un principe?” Circa
l’apparenza del Signore Gesù un profeta disse: “..Non aveva figura né bellezza

da attirare i nostri sguardi, né apparenza da farcelo desiderare.”( Isaia 53:2)


Non è stato l’aspetto fisico del Signore a farlo veramente bello; Gesù è

bello perché Lui è realmente.

5. “ Fa' che la fanciulla alla quale dirò: "Deh, abbassa la tua brocca perché io beva", e


che mi risponderà: "Bevi, e darò da bere anche ai tuoi cammelli", sia quella che tu hai


destinata al tuo servo Isacco…” ( Genesi 24:14). Qui abbiamo una meravigliosa


prova della cura che Dio ha verso di noi.

Il servo voleva un segnale per mezzo del quale lui avrebbe potuto
riconoscere la donna che Dio aveva per il suo signore.
Questo è un modo attraverso il quale anche tu puoi riconoscere la persona
che Dio ha per te.
Se stai cercando la compagna/o che Dio ha preparato per te, chiedi per
prima cosa : Può lui o lei dare da bere anche ai cammelli? Ciò significa: La
persona per la quale sei attratto è disposta veramente a lavorare e servire
nella vita? E’ disposta a percorrere due miglia per amore a te? Desidera
cercare Dio insieme a te? E’ disposta anche a sacrificarsi per l’ opera di Dio?
“Non siate pigri nello zelo; siate ferventi nello spirito, servite il Signore, 12 allegri nella speranza,

costanti nell'afflizione, perseveranti nella preghiera; 13 provvedete ai bisogni dei santi, esercitate

l'ospitalità.” ( Romani 12:11-13)

Conclusione:

Non andare in giro cercando con disperazione la persona con la quale dovrai sposarti. 
Paolo scrisse: “Or io desidero che voi siate senza sollecitudine. Chi non è sposato, si preoccupa
delle cose del Signore, come possa piacere al Signore; 33 ma chi è sposato si preoccupa delle
cose del mondo, come possa piacere alla moglie. 34 Vi è differenza tra la donna sposata e la
vergine; quella che non è sposata, si preoccupa delle cose del Signore per essere santa nel
corpo e nello spirito, ma la sposata si preoccupa delle cose del mondo, del come possa piacere al
marito.” ( 1 Corinzi 7:32-34).

Preoccupati
allegria. La Sua Parola dice: “Prendi il tuo diletto nell'Eterno, ed egli ti darà i desideri del tuo
cuore.” ( Salmi 37:4).

Estudio enviado de la Hna Diana - Jòvenes de Colombia, iglesia en Medellìn - Misionero, pastor Pereira Das Neves. Paz de Cristo a nuestros Hermanos de la bella Colombia. Bendiciones...



J-010 LOS CAMELLOS TAMBIÉN BEBEN / 1
Pastor Gabriel Pereira das Neves
Asamblea Apostólica

Edificando vidas para Cristo

Los camellos también beben

¿Crees tú que Dios puede guiarte hacia el cónyuge que te corresponde? Una historia bíblica nos dice la manera en que Dios lo hace: “Y dijo Abraham a un criado suyo, el más viejo de su casa, que era el que gobernaba en todo lo que tenía: pon ahora tu mano debajo de mi muslo, y te juramentaré por Jehová, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás para mi hijo mujer de las hijas de los cananeos, entre los cuales yo habito.” (Génesis 24.2-3).

En este capítulo hay mucho más que simples principios generales sobre el noviazgo o el matrimonio; hay cinco importantes verdades espirituales acerca de cómo encontrar el compañero/a que Dios tiene para tu vida.


1. He aquí la primera norma para hallar al compañero de tu vida en conformidad con la voluntad de Dios: No te ena mores de los canan eos. ¿Quiénes son los cananeos? Un cananeo es una persona inconversa, alguien que realmente sólo se preocupa por sí mismo, que nunca hace una entrega real de su vida al Señor, que no coloca a Cristo en el centro de su vida. ¡Cuidado! En la iglesia también pueden haber cananeos.

Nota cuánto se parece la palabra cananeo a la palabra canino. Y el amor cananeo en su forma más suave es un amor “de perrito” y en su peor forma es el preludio a una “vida de perros”. Si estableces amores con un cananeo no te sorprendas si te trata como a un perro. Un perro es algo que tú alimentas, algo con lo que juegas; pero no alguien con quien se contrae matrimonio.


2. “...sino que irás a mi tierra y a mi parentela” (Génesis 24.4). Busca entre el puebl o de Dios a la persona que él tiene para tu vida . Los matrimonios cristianos tienen que edificarse sobre un amor común a Jesús. “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? 15¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo?” (2ª Corintios 6.14,15).

Puedes hallar gran placer por el sólo hecho de estar con la gente de Dios, y puedes llegar a hacer muchas amistades entre los discípulos de Jesús. Si no puedes tener amistades con otros cristianos, mucho menos tener un noviazgo cristiano. “...si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros...” (1ª Juan 1.6).

3. El criado de Abraham hizo una buena pregunta: ¿Cómo iba él a hallar la mujer precisa para el hijo de su señor? Abraham le dio un consejo: “Jehová, Dios de los cielos, enviará su ángel delante de ti y tú traerás de allá mujer para mi hijo.” (Génesis 24.7). Así que la siguiente norma es ésta: Sal con el ángel que ha sido enviad o por Dios.

Hay algo seguro con respecto al siervo de Abraham: El realmente creyó que Dios lo guiaría exactamente hacia la mujer que iba a buscar; y si tú quieres lo mejor de Dios realmente tienes que confiar que Dios te dirijirá en la misma manera. “Como creíste te será hecho”.


A
lgunos jóvenes tienen temor de confiar en Dios con respecto a la persona con quien han de casarse. Estos dejarían que Dios maneje todo lo demás, pero tienen la rara idea de que Dios no sabe nada en cuanto a escojer al cónyuge para ellos. Sin embargo, hay dos cosas con respecto a Dios que debemos saber: 





(1) Él es es realmente sabio. 


(2) Él es es realmente amor.




Eso significa que Él nunca comete un error y que lo que Él decide para nosotros siempre cuadrará bellamente con lo que nuestro corazón necesita en verdad. El Angel de Dios hallará para ti otro “ángel” terrenal con el cual puedas compartir tu vida.

4. “Y la doncella era de aspecto muy hermoso.” (Génesis 24.16). ¿Estás listo para la siguiente norma? Ella tiene que ser bella ; él tiene que ser atractivo. ¡Eso es lo que dice la Biblia! Dios es mucho más bondadoso de lo que jamás hayamos imaginado. Nadie comprende la profundidad de los pensamientos amorosos que Él tiene para nosotros.

S
í, la persona con la cual tú te cases tiene que ser bella o muy bien parecida, por lo menos, para ti. Tal vez pienses que eres feo y por tanto la mujer de tus sueños pensará que no eres el hombre adecuado. Tal vez pienses que eres fea y por tanto el hombre de tus sueños piensa que no eres la mujer que él quiere.



N
o te desesperes. ¡Puedes llegar a ser bella y tú puedes llegar a ser de buen parecer! La belleza no viene envasada ni la produce la genética. Hay algunas personas que tienen caras lindas pero corazones feos y por eso no son bellas. La belleza real comienza desde adentro.



William Booth les dijo a sus hijos: “No busquen tan sólo una cara bonita con la cual vivir los 365 días del año. Busquen aquellas gracias y dones femeninos más profundos con los que la madre de ustedes ha enriquecido mi vida.” La persona más bella externamente en la Biblia no fue el Señor Jesús. Tal persona fue un ángel de tal gloria y belleza que fue llamado “el hijo de la mañana”; pero su belleza lo hizo orgulloso, pecó contra Dios y fue echado del cielo.

La gente que vio al Señor en la tierra no regresaba diciendo: “¡Extraordinario! ¿No tenía él la apariencia de un gran príncipe?” Sobre la apariencia del Señor Jesús un profeta dijo: “No hay parecer en él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos.” (Is aías 53.2). No fue la apariencia física del Señor Jesús la que lo hacía verdaderamente bello; Jesús es bello por lo que él es realmente.

5. “Sea, pues que la doncella a quien yo dijere: Baja tu cántaro, te ruego, para que yo beba, y ella respondiere: bebe, y también daré de beber a tus camellos, que sea ésta la que tú has destinado para tu siervo Isaac.” (Génesis 24.14). Aquí tenemos una maravillosa prueba del cuidado de Dios. El criado quería alguna clase de señal por medio de la cual él podía reconocer a la mujer que Dios tenía para su señor. Esta es una manera mediante la cual tú puedes también reconocer a quien Dios tiene para ti.

S
i eres alguien que está buscando el compañero/a que Dios te ha preparado, pregunta primero:



¿Puede Él o ELLA dar de beber también a los camellos? Esto significa: ¿La persona a la cual estás siendo atraído está dispuesta realmente a trabajar y a servir en la vida? ¿Está dispuesta a ir “la segunda milla” por amor a ti? ¿Desea buscar a Dios junto contigo? ¿Está dispuesta a sacrificarse también por la obra de Dios? “En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor; 12gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración; 13compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad.” (Romanos 12.11-13).


CO
NCLUSIÓN





N
o andes merodeando por ahí con desesperación, buscando alguien con quien casarte. 






Pablo escribió: “Yo preferiría que estuvieran libres de preocupaciones. El soltero se preocupa de las cosas del Señor y de cómo agradarlo.33 Pero el casado se preocupa de las cosas de este mundo y de cómo agradar a su esposa;34 sus intereses están divididos. La mujer no casada, lo mismo que la joven soltera, se preocupa de las cosas del Señor; se afana por consagrarse al Señor tanto en cuerpo como en espíritu. Pero la casada se preocupa de las cosas de este mundo y de cómo agradar a su esposo.” 


(1ª Corintios 7.32-34).


M
ejor preocúpate de estar unido a Jesús, y de que Su amor sea la fuente de tu contentamiento. Su Palabra dice: “Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón.” (Salmos 37.4)





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